Ir al contenido principal

Inconcebible

Hace algún tiempo que se viene barajando tanta legislación pro-algo que me pregunto si realmente es inconcebible imaginar que alguien tal vez NO quiera gozar de tanto derecho. Les pongo en contexto. Mañana se legaliza la marihuana en el Ecuador ¿Es inconcebible imaginar que habrá personas que NO la consuman? Del mismo modo -RESALTO, ACLARO, PUNTUALIZO, TILDO, ASENTÚO, yo no tengo útero y hablo sin justa causa- sería inimaginable, inconcebible considerar que una niña a la que se le hizo madre en contra de su voluntad ¿Decide pro-su bebe? O tal vez estamos tan acostumbrados a pensar que merecemos una u otra cosa y como infantes exigimos derechos, derecho a esto o a lo otro. Cuando creo que realmente deberíamos estar indignados y exigir obligaciones.

¿Obligaciones? Si, obligaciones.

¡Deberíamos estar indignados! No porque los Estados no nos reconocen más derechos; sino porque estos son realmente inservibles al momento de cumplir con su parte. Los gobernantes se han vuelto padres permisivos. Explico ¿Han visto esos padres que dicen a todo con tal de no confrontar a sus hijos? ¿Alguna vez han tratado con esos niños? ¿Han lidiado con niños que no conocen límites? Es un dolor de cabeza, es una verdadera pesadilla la cantidad de pataletas que hacen por poco menos que nada. Sus padres con tal de ahorrar ese escándalo -Si mijito, yo le compro…- y el silencio reina y la paz es pírrica; la malcriadez se alimenta y los niños se malacostumbran y esperan que su siguiente capricho sea cumplido para ayer. ¿Qué niño de padres permisivos han visto ustedes decir –¡Oye mierda! Donde están mis verduras; necesito verduras para alimentarme bien así no me gusten-?

Eso más o menos puedo ver en tanta legislación pro-tus derechos. ¿Dónde está la sociedad que, en lugar de exigir más derechos, sale y exige que se meta preso a tanto Político Ladrón? ¿Dónde se ha visto una sociedad que impávida mira cómo se da inmunidad a candidatos a la presidencia? Dónde están las sociedades que se respetan y tienen amor propio para decir a sus gobernantes -Además de estos derechos es imperativo que dejen de robarnos hasta el aire- Realmente quisiera decir -Dejen de vernos la cara de cojudos-

Vamos a exigir que además de darnos acceso a ser candidatos a la presidencia; a quienes crean que están a la altura de las circunstancias les busquen el rabo de paja y los incendien en caso de encontrar algo.  Vamos a exigir qué además de legalizar el aborto o despenalizarlo se cree un sistema de apoyo emocional, psicológico, espiritual y físico para que las víctimas de violaciones consideren que hay además del aborto otras opciones. Ya ven por dónde va la cosa… no solo a pedir permiso para hacer algo, sino también a crear el sistema que fiscalice, facilite, cristalice, ampare, escruten… o lo que mierdas haga falta para decir que si a un derecho no sea la solución de padre dejadito para silenciar un capricho social.

No se irán a ofender. Sí a los derechos, todos los que se les ocurra. Yo personalmente quisiera tener derecho a tomarme una cerveza en la vereda sin que se considere libar en la vía pública. Pero sobre todo quiero ver una sociedad que en lugar de exigir que el estado les reconozca más derechos, les salgamos a meter un ají en el lugar más oscuro y armemos el escándalo más berrinchozo y esacandalozo hasta que tanto mal padre que tenemos de gobernante nos haga comer las verduras y nos den educación de calidad, sistemas sociales que respondan para dar soporte integral a víctimas de violación. Sistemas donde todo nos sea permitido, pero entendamos socialmente que no todo nos conviene.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La era del Ofendimiento

La verdad es que hablar de cosas como eso sin que alguien se ofenda, o me cuelgue de los pulgares a esta altura del siglo XXI es imposible. En estos tiempos donde todos son activistas activos fervientes de causas que si, o no les conciernen; no se puede tener una postura pública conservadora liberal izquierdo derechista sin, que la sobre estimulación informática mediática nos vuelva terrorista de alguna causa. Porque además no se puede ser tibio, la sociedad espera que protestemos posteando dando likes y compartiendo, virtualizando los espacios de debate y nos lancemos piedras informáticas. Tenemos que tener una postura, si señor. Tenemos que tener convicciones; pero sobre todo tenemos que tener las mas efusivas ganas de mantener la armonía y aceptar que no todos están obligados a pensar como nosotros. Debemos ser tolerantes y debemos aceptar que si tenemos posturas conservadoras; los todo-tolerantes pro-todo, van a ser los primeros en intolerarnos. Los openmind nos closeminding porque...

La Longomicina

Harán el favor de no ofenderse por el título, la longomicina es un remedio, una pócima mágica, un analgésico, es... bueno pues es como quien dice la vacuna de COVID criolla.  (Paréntesis - ¿vieron cuando sacan del cajón un esfero viejo y cuando escriben deja espacios vacíos porque no corre bien la tinta? Algo así me siento desempolvando este espacio de esparcimiento literario. Si encuentran espacios en blanco es por el esfero viejo) Volviendo al tema.  ¿Nunca les dijeron de chiquitos algo como -no te has de morir, es longomicina pura- haciendo referencia a que comieron algo en la calle o algo que se cayó al piso que tal vez les podría caer mal? Bueno les explico: la longomocina es el conjunto de defensas que el cuerpo humano genera por su sabia e infinita naturaleza. Solo las puede crear al exponerse -mesuradamente- a delicias de la calle, buses, un papihuevo, un agachadito, salir de la casa, ir al supermercado, tomar agua de la llave, en sí vivir. Pero sobre todísimo no desin...

Zona de Confort Zero

Cansado del vaivén de hordas de gente colmando bares y discotecas se retiró meditabundo a celebrar introvertido el fin de año en el campo. Con más de una cuestión que quería despejar de su mente se decidió por un pequeño pueblo montañés. El menos acontecido de mis amigos -pensaba yo- hasta que un día a mediados de enero me llamó a contar avergonzado esta anécdota. Mientras me la contaba iba subiendo en el escalafón de historias que alguna vez fueron inmortalizadas en este blog. Esta anécdota superaba sin ningún esfuerzo la vez que fui rescatado en ambulancia de nieve en las Montañas Rocosas, aplastaba como a una hormiga cuando hice vomitar a una pequeña niña con el putrefacto aire que emanaron mis entrañas; y, a mi criterio empataba con la vez que etílico el taxista entregaba rendido las llaves para que conduzca alguien más en media Vía Interoceánica. Mientras leen, no traten de ponerle cara al personaje, disfruten de esta gran aventura. Habiendo leído los mejores...